viernes, 17 de enero de 2014

Mercosur - Se demora la Cumbre de Caracas

Vaya a saber bien uno porqué, la Cumbre prevista para tener lugar en Caracas ha sufrido una nueva postergación, la tercera creo si no me falla la cuenta.

Quizás los más altos funcionarios tengan cosas más importantes que hacer; sin duda con tantas asociaciones que tenemos en nuestra América ello no es difícil.

No obstante,  alguien que ha seguido al Mercosur desde su concepción entre fines de 1990 e inicios de 1991, no puede menos que preguntarse qué puede haber de más importante para estos países -que constituyen una parte tan significativa del PBI de América del Sud- que reintegrar plenamente al Paraguay al bloque y dejar sanjado el grave litigio creado hace ya tantos meses.

Esperamos, en bien de la institucionalidad y el comercio entre países vecinos, que no vuelva a demorarse el encuentro.

miércoles, 8 de enero de 2014

Una noble fuente de alimento sustentable

Es un placer traerles, para ir dando inicio al 2014, un artículo de mi amiga Pía Mom publicado hace pocos días en La Nación de Buenos Aires.

Mauricio López Dardaine
 
 
En pie, el algarrobo es fuente de alimento
 
María Pía Mom
Para La Nación
 
La mayoría de los países en vías de desarrollo, donde los cultivos no prosperan lo suficiente por condiciones climáticas de aridez o por el progresivo deterioro de sus suelos, enfrentan hoy con una grave situación de déficit alimentario. Cerca del 70% de la Argentina presenta condiciones ambientales de aridez o de semiaridez, sin embargo, la frontera agrícola sigue avanzando sobre bosques, pastizales y sabanas, comprometiendo la biodiversidad, los servicios ambientales de estos ecosistemas y a los pobladores que los habitan.
Pese a este desplazamiento de la agricultura, posibilitado por los avances tecnológicos, existen productores que ven la necesidad y la posibilidad de explorar otras alternativas que, por falta de costumbre o de conocimiento, han quedado en el olvido. Se trata del aprovechamiento sustentable de distintos productos forestales no madereros (PFNM) provenientes de los bosques, es decir, distintos de la leña y el carbón. Entre ellos podriamos destacar el uso del fruto del algarrobo (Prosopis sp), algarroba, para la elaboración de harina.
En muchas regiones del norte argentino, varias comunidades originarias y  pequeños productores han rescatado esta costumbre con el apoyo de distintos organismos nacionales, como la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable a través de la Ley de Bosques, autoridades provinciales y ONGs. Esta actividad, además de mejorar las economías regionales y de promover el consumo de un alimento natural con alto valor proteico, rico en vitaminas y minerales y apto para celíacos, contribuye a reafirmar y a concientizar sobre el valor agregado del árbol y sobre la importancia de mantenerlo en pie.
Constituye un componente importante de la vegetación de zonas áridas y semiáridas, caracterizadas por la escasez de agua, baja fertilidad de los suelos y, a menudo,  alta salinidad. Como estrategias para detener el avance de la desertificación, minimiza el escurrimiento del suelo y controla su erosión; estabiliza médanos; fija nitrógeno debido a su capacidad para generar simbiosis con bacterias fijadoras del mismo formando “islas de fertilidad” bajo su canopia, debido al aporte de materia orgánica al suelo, que mejora las propiedades físicas, químicas y microbiológicas del mismo.
Existen 48 especies entre América, Asia y África. Argentina es el mayor centro de variación actual del género, con 27 especies, de las cuales 13 son endémicas. El 60% del total de especies del género tiene un área de distribución que abarca la mayoría del territorio continental, excepto el sur de la Patagonia y la provincia de Misiones.
Son especies xerofíticas, soportan de 50 a 1400 mm de precipitaciones al año. Crecen en suelos arenosos, arcillosos, salinos, rocosos e inundables, desde el nivel del mar hasta los 3000 metros. Desarrollan un profundo sistema radical que puede alcanzar hasta casi 60 metros de profundidad, posibilitando el desarrollo de ejemplares en áreas con lluvias muy inferiores a los requerimientos normales.
A nivel socioeconómico, resulta un seguro contra el hambre, dado que a partir de sus frutos molidos se obtiene harina de alto valor proteico, nutritiva, libre de gluten y apta para elaborar distintos productos de panadería. Es una planta melífera que promueve la creación de empleos y el flujo de dinero; aporta combustible para uso doméstico; mejora las pasturas y los cultivos por el aporte de nitrógeno y materia orgánica, y provee sombra.
En ganadería se ha comprobado la importancia de la sombra, ya que con ella los animales aumentan la producción de carne. Además, para la actividad pecuaria la algarroba resulta un importante aporte forrajero, en especial en épocas de escasez de oferta alimentaria. Se registran casos de productores que en invierno compensan la caída (cantidad y calidad) de la provisión de pasturas nativas con el aporte proteico de la algarroba.
Pero el algarrobo posibilita, asimismo, otros usos para sus frutos. Por ejemplo, a partir del tostado de los mismos se obtiene un sustituto del café; por fermentación, se produce alcohol; gomas para la industria alimenticia; azúcares; endulzantes; carbohidratos sin almidón, y resinas polifenólicas.
Entonces, frente a la tala indiscriminada y al efecto negativo de los desmontes, resultaría indispensable establecer sistemas de aprovechamiento sustentable, generando valor agregado a las especies del bosque, evitando la pérdida de diversidad biológica; la fragmentación de ambientes y de hábitat; la degradación del suelo y, consecuentemente, contribuyendo a mejorar las economías regionales, de modo de evitar las migraciones y  rescatar costumbres ancestrales.
 
La autora es doctora en Ciencias Biológicas (FCEN-UBA)