viernes, 24 de agosto de 2018

¿Qué es RPA?


¿Qué es RPA?
Mauricio López Dardaine

En primer término RPA son las siglas de Robot Process Automation -robots de software (bots) para la automatización de procesos- Se trata de un software y no de un robot “físico”, un software que puede inter-actuar con los sistemas como si fuese un usuario humano. Por ejemplo, como si fuese un contador que entra al sitio de la AFIP para llenar una declaración jurada de ganancias. Esto viene a cuento porque ayer tuve la suerte de asistir a un work-shop sobre este tema en la Cámara de Comercio Argentino-Alemana. Y se me ocurrió que aquellos que estamos ligados a empresas y no sabemos muy bien de qué se trata, deberíamos empezar a enterarnos. Y como en la era digital estamos, me puse a buscar una explicación que fuese asequible en Internet. Bueno, aquí abajo hay una no muy larga, que me parece bastante clara como para poder entrar en materia. Al final les comento, muy sintéticamente, uno de los ejemplos de la reunión de ayer que me quedó más grabados.
Les adelanto que mi mayor preocupación es ¿cómo hacemos para que estos bots para la automatización de procesos no creen una brecha entre las empresas usuarias y aquellas que nunca pensaron en aplicar RPA?
“RPA es un tipo de software que ha ganado popularidad rápidamente en muchas industrias. Con tanta atención mediática alrededor de RPA, está claro por qué las empresas están entusiasmadas con el uso de robots de software (bots). Lo que no está tan claro para muchos de sus potenciales usuarios es cuál es la diferencia entre el software de RPA y los demás tipos de automatización (o por qué es mejor).
Al tratarse de una tecnología nueva, la definición de RPA todavía está en transformación. Proveedores y expertos en tecnología concuerdan en que RPA utiliza bots —o agentes— para agilizar las tareas repetitivas tanto para los especialistas de IT como para los usuarios de Negocio. 
Cuando comenzó a utilizarse el término RPA, fue para referirse casi exclusivamente a la manipulación de sistemas y aplicaciones a nivel de la interfaz de usuario. Es ahí donde entra la parte de “robótica”. El bot interactúa con los sistemas de la misma manera que lo hace un usuario humano: tocando botones, escribiendo las credenciales de inicio de sesión en un sitio web, leyendo palabras de un pdf, etc. Esta definición de RPA, aún constituye el núcleo de sus funciones. Sin embargo, a medida que avanza la tecnología, con mayor frecuencia se la presenta como una solución de automatización empresarial más completa. Una tecnología que puede interactuar con una interfaz gráfica de usuario, pero también una tecnología que se integra en profundidad y tiene sofisticadas características para el Negocio. 
Este cambio de enfoque también amplía los beneficios de RPA, que pasan de ahorrar algunas horas en las tareas de IT de un usuario, a potenciar una transformación digital para toda la empresa.”

De los ejemplos que se analizaron ayer, me quedó especialmente el referido al tema impositivo de las empresas, bancos o grandes comercios. En esencia, lo que han hecho los que comenzaron hace unos dos años a utilizar RPA en sus empresas (no sin el apoyo inicial de consultores especializados), ha sido más que nada utilizar este software que reemplaza al operador humano para realizar tareas repetitivas y de bajo valor agregado, como el llenado por un miembro (o varios miembros) de la empresa, el banco, el comercio, de las planillas (Excel) de impuestos nacionales, provinciales y municipales, que tanto tiempo consumen. Y liberar entonces la capacidad creativa de estos miembros del equipo para analizar cómo mejor administrar el manejo impositivo de la firma. Muchos de los usuarios hacen que el o los bots trabajen de noche, para que cuando el responsable llegue a la mañana siguiente tenga ya su planilla Excel en condiciones de ser analizada. Y no haya perdido valiosas horas buscando en los distintos archivos del sistema una serie de datos para poder llenarla.

Sin duda se trata de un tema para que todos vayamos estudiando más a fondo.

El aspecto social, de adaptación, de re-capacitación, no estuvo ausente de nuestras discusiones, pero es material para otra entrega. Porque a diferencia de nosotros, los bots pueden trabajar las 24 horas del día, siete días por semana, 365 días al año; no se  resfrían, no se toman vacaciones, no se casan, no se cansan, nunca llegan con resaca a la oficina. He ahí su fuerte . Y en ello consiste el fortísimo reto que presentan a la sociedad humana, que luego de sólo 50 años está frente a una nueva  revolución, la cuarta, en el campo industrial y de la empresa de servicios. Una que además tiene un ritmo de avance nunca visto anteriormente.